HEMATOMAS ESPONTÁNEOS
La aparición de pequeños (y en ocasiones no tan pequeños) hematomas en brazos y piernas es un motivo de consulta habitual en el día a día. Pueden aparecer tras pequeños traumatismos, rascado o en ocasiones sin motivo aparente. Habitualmente se da en mujeres, de mediana o avanzada edad.
Un hematoma subcutáneo es la acumulación de sangre que se produce debajo de la piel por la ruptura de pequeños vasos sanguíneos, generalmente capilares. Los hematomas comunes que suelen aparecer después de un traumatismo mientras que los hematomas espontáneos surgen de manera inesperada, lo que puede generar preocupación.
Las causas de los hematomas espontáneos pueden variar, la mayoría de los casos se deben a condiciones benignas que no requieren de tratamiento, pero en ocasiones pueden estar asociados con condiciones médicas concretas.
Pueden deberse a alteraciones en la sangre (por alteraciones de la coagulación) o en los vasos (por fragilidad capilar):
* ALTERACIONES DE LA COAGULACIÓN:
La coagulación se compone de unas células (las plaquetas) y unas proteínas que hace que se unan entre ellas (sistema de coagulación)
Enfermedades que afectan al sistema de coagulación o a las plaquetas pueden llevar a la formación de hematomas espontáneos.
- En relación a las plaquetas hay alteraciones intrínsecas del paciente que puede afectar su producción (trombocitopenia); aunque en la mayoría de los casos en los que están involucradas se debe a factores externos que afectan a sus producción o a su funcionamiento; por ejemplo medicamentos antiagregantes como el Adiro, antiinflamatorios como los AINEs
- En relación al sistema de coagulación tambien hay causas intrínsecas al paciente como alteraciones geneticas (hemofilias) y disfunciones en relación a factores externos como el déficit de vitamina K, medicación anticoagulante como el Sintrom o enfermedades hepáticas como la cirrosis.
* FRAGILIDAD CAPILAR:
Esta suele ser la causa principal de la aparición de hematomas espontanteos. La fragilidad capilar se debe a alteraciones en la pared de los capilares que hace que sean mas susceptibles a romperse.
El principal motivo para la fragilidad capilar y totalmente fisiológico es: el envejecimiento de los vasos. Con la vida la pared de los capilares se adelgaza y pierde elasticidad, lo que hace que sean más susceptibles a romper, provocando pequeños hematomas superficiales.
Tambien pueden provocar alteración de la pared capilar, y aumento de su fragilidad otros factores:
- Déficit de vitaminas: Vitamina C (imprescindible para la fabricación del colageno de la pared de los vasos) y bioflavonoides
- Uso c´ronico de corticoides: los corticoides frenan la producción de colageno que es esencial en la pared de los vasos. Con menos colágeno la pared pierde elasticidad y es más susceptible a romperse.
- Enfermedades del tejido conectivo
- Exposición a toxinas o radiación: principalmente el alcohol, que afecta tanto a la fragilidad capilar como a la producción de plaquetas.
- Enfermedades crónicas: la hipertensión arterial, la diabetes mellitus... pueden afectar a la pared capilar.
En resumen, en la mayoría de los casos la aparición de hematomas espontáneos se debe al envejecimiento y cambios fisiológicos en la pared de los vasos, que se hacen más frágiles con el paso de los años; o a la toma de medicamentos que provocan cambios en la coagulación. En algunos casos se debe a patología crónica como enfermedades hepáticas, diabetes... Y excepcionalmente se debe a trastornos de la coagulación, enfermedades del tejido conectivo, leucemia...
¿Cuándo es necesario estudiar la aparición de hematomas espontaneos?
En caso de presentar hematomas muy recurrentes, de gran tamaño o en localizaciones poco habituales como espalda, abdomen o tórax. También en caso de asociarse otros síntomas como fiebre, pérdida de peso, cansancio, sangrado...
El primer paso para el diagnóstico puede hacerse con el médico de atención primaria y consiste en pruebas de laboratorio con hemograma, estudio de coagulación y función hepática entre otras.
# SÍNDROME DE ACHENBACH
Mención aparte tienen los hematomas espontaneos en las manos, tambien conocido como Síndrome de Achenbach. Tras un episodio de picor o dolor agudo, típicamente en un dedo, aparece un hematoma que se puede extender hasta la palma, dando un aspecto azulado al dedo. El hematoma resuelve solo en unos días sin necesidad de tratamiento. Es una entidad benigna y autolimitada, más habitual en mujeres, que no precisa más tratamiento que analgesia si hay dolor, reposo relativo de la mano y paciencia.